Conoce la diferencia entre las necesidades y los deseos
Autora: Carmen Simé
La clave para lograr invertir, ahorrar y alcanzar todas las metas financieras que te propongas está en encontrar el equilibrio entre tus necesidades y tus deseos, lo que te permitirá vivir bien hoy, tener una vida alegre y estar agradecido, pero sin tirar el dinero a la basura. No hay fórmulas mágicas para lograrlo, cada quien debe saber hasta dónde puede comprometerse para lograr sus objetivos financieros.
Definición de necesidad y deseo
Wikipedia nos da las siguientes definiciones:
Necesidad: es aquello que resulta indispensable para vivir en un estado de salud plena.
Deseo: Se dice del anhelo de saciar un gusto.
En otras palabras, Necesidad es lo que tienes que tener y deseo lo que te gustaría tener.
Entender la diferencia entre las necesidades y los deseos es muy sencillo mientras lo estás leyendo en este artículo o se lo estás tratando de explicar a otros. La complicación está cuando llegamos a una tienda, ahí es donde se demuestra si realmente estamos claros en qué es una necesidad y qué es un deseo.
Por ejemplo… ¿Una rica dona revestida de chocolate? Podemos decir que es una comida, entonces lo ponemos en necesidad. ¿Qué me dices de esa blusa de marca que la confeccionaron a tu medida? Eso es una ropa, y necesitas un poco más en tu closet, así que ¿por qué no le marcamos como una necesidad?. Confundir los deseos y las necesidades es sumamente fácil y por ende no cumplir con el presupuesto; y olvidarnos de nuestros objetivos financieros.
Si analizamos las veces que nos hemos convencido con ejemplos como el que te mostré anteriormente, nos damos cuenta del daño que hemos hecho a nuestras finanzas por no distinguir de forma apropiada la diferencia entre las necesidades y los deseos.
A todos nos ha pasado en algún momento que nos convencemos de que necesitamos cosas que realmente lo que estamos es deseando. Sigue leyendo este artículo para que aprendas a distinguir entre una necesidad y un deseo, esto te ayudará a evitar caer en gastos que no has planificado con anterioridad.
Si calculas el daño que ha hecho a tus finanzas el no diferenciar entre las necesidades y los deseos, te aseguro que es mucho más de lo que habías pensado. No te preocupes, aquí está la solución a tu problema, es sencillo, comienza por comprender realmente lo que necesitas y lo que deseas.
Diferencia entre las necesidades y los deseos
Para sobrevivir sólo necesitas cuatro cosas:
- Un techo
- Comida y agua suficientes para gozar de buena salud
- Ropa y zapatos para mantenerte cómodo y vestido apropiadamente
- Productos básicos del cuidado de la salud e higiene
Todo lo demás como: una casa grande, mucha ropa y zapatos de marca, alimentos de un nivel más alto, un carro nuevo; estos son deseos.
Te preguntarás, entonces ¿Sólo puedo comprar las cosas que son necesarias y nada más? De ninguna manera.
Debemos vivir, no solamente sobrevivir, claro que podemos disfrutar de algunos deseos a lo largo de ese camino que se llama vida. Pero aprendiendo a esperar para tener las recompensas y disfrutando esos deseos como lo que son, un extra.
Cuenta tus bendiciones…
A medida que vayas practicando el diferenciar entre necesidades y deseos, te darás cuenta que has disfrutado de muchos deseos en el transcurso de tu vida, lo que te llevará a tener más gratitud.
Si sólo te enfocas en aquellas cosas que deseas tener, pero que no puedes pagar, pasarás por alto darte cuenta de todas las cosas que tienes. Revisa las bendiciones que has recibido, eso te permitirá disfrutarlas y sentir una gran libertad, no te engañes sintiéndote en una prisión cuando en verdad eres libre.
Reflexiona sobre aquellas cosas que quieres lograr en la vida y toma acción para lograrlas, no seas del montón que solo suspiran deseando y nada consiguen, porque ni siquiera lo intentan, tú haz que las cosas sucedan.
Escribe esos deseos que te gustaría lograr, ponles fecha y cuánto dinero necesitas para lograrlo. Luego inclúyelo en tu presupuesto, no importa el tiempo que te tomará lograrlo, pero cuando vayas dando pequeños pasos hacia ese objetivo, te sentirás muy motivado a continuar.
Cuando decides organizar tus finanzas, no se trata de que solo sobrevivas o que dejes de vivir, de ninguna manera, lo que hacemos es planificar y ahorrar para lograr todos nuestros objetivos financieros sin endeudarnos. Cuando planificamos nos damos cuenta si necesitamos apretar el cinturón en algunos gastos o si tenemos que movernos a generar algunos ingresos extra para lograr nuestro objetivo más rápido.
Ya sabes, la idea no es quedarnos paralizados en aquello que no puedo tener, es disfrutar lo que tenemos y esforzarnos un poco más para lograr satisfacer esos deseos que queremos alcanzar.
¿Cómo estás avanzando en la organización de tus finanzas, ya estás teniendo buenos resultados? Déjame un comentario.
Un gran abrazo
Carmen Simé
Tu guía financiera
www.gestionatusfinanzaspersonales.com
Sobre la autora
Carmen Simé “Tu guía financiera”, pone a tu disposición las herramientas para que logres tus metas financieras. Si quieres vivir para disfrutar del dinero con tus seres queridos, lograr estar libre de deudas y tener la libertad financiera que siempre has deseado, inscríbete en su boletín gratuito y te envía de regalo su E-book «10 Estrategias para salir de las deudas» valorado en 18 dólares. Es tuyo gratis llenando el siguiente formulario. Sin spam y privacidad garantizada.
Suscríbete y descarga tu copia
A mi tampoco me agrada el Spam
Tu información está a salvo conmigo